Santa Rosa, lunes 26 de junio de 2017
Un informe pericial que recibió en las últimas horas la jueza de Control María Florencia Mazza reafirma la resolución judicial que tomó el fiscal Máximo Paulucci respecto a desestimar que los tres jueces que firmaron el fallo por abusos en el jardín de 25 de Mayo lo hayan elaborado antes de los alegatos y también que lo hayan filtrado, tal como denunció el abogado defensor de los docentes condenados, Omar Gebruers.
A fines de abril, el funcionario judicial archivó parcialmente el expediente por no encontrar pruebas que comprometan a los jueces Gastón Boulenaz, Andrés Olié y Gabriel Tedín. Ahora, el funcionario judicial recibió un informe pericial de la Fiscalía de Delitos Informáticos del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma que abona la misma interpretación.
Fuentes judiciales confirmaron a El Diario que Paulucci recibió el informe en las últimas horas y que tiene que seguir analizándolo porque tiene intrincados detalles técnicos. Sin embargo, una evaluación preliminar le permitiría sostener que fue correcta la resolución judicial que ya tomó y que no hay indicios que comprometan a los magistrados, según confiaron.
Investigación abierta
De todos modos, el funcionario judicial continúa investigando la sustracción de un borrador del fallo de la oficina del juez Andrés Olié. No hay autores o sospechosos sindicados hasta el momento. Cabe recordar que los tres jueces habían pedido al Ministerio Público Fiscal abrir la investigación, luego de la denuncia pública del letrado Omar Gebruers.
Las manifestaciones públicas de Gebruers respecto a que el fallo ya estaba redactado antes de que se escucharan los alegatos de las partes y que se había “filtrado” fuera de los tribunales se produjeron una vez que se conoció la condena de los cuatro docentes por los abusos en el jardín. El Superior Tribunal de Justicia también inició en forma paralela un sumario administrativo.
“La investigación por la sustracción de la información continúa. Se acreditó que era información genuina y que llegó a manos de terceros”, había explicado el fiscal en su momento, consultado por El Diario. “Sí está desestimado parcialmente en relación a la posible imputación de los jueces, a que ellos hayan dado lugar o acceso a un tercero en forma voluntaria”, diferenció.
“También está desestimado que se realizara previamente al proceso de deliberación, de los alegatos, que fueron el 22 de diciembre. Se investigó esa posibilidad y las pericias establecieron que no, se trabajó en la computadora oficial y se acreditó científicamente, a través de pericias, incluso con los libros de ingresos y egresos de los jueces”, indicó.
Paulucci explicó que se comprobó la filtración de “un borrador, un proyecto de sentencia, del voto del juez Olié, pero no la sentencia definitiva”. “Ese documento que circuló previo a la lectura de la sentencia es genuino. Era un borrador, un proyecto de voto de uno de los jueces. No está terminado. Se sustrajo el proyecto de voto del doctor Olié. No era la sentencia. Pero sí se demostró que era lo que circuló, era exactamente el mismo borrador. En base a pericias testimoniales, en las computadoras personales y de los despachos, en el servidor del Poder Judicial, se pudo comprobar”, reafirmó.
La denuncia
El abogado Gebruers hizo la denuncia pública el pasado 1 de febrero luego de la lectura del fallo, acto al cual no asistió. En declaraciones a los medios, ese mismo día aseguró que le habían hecho llegar el 10 de enero una copia de la sentencia y que estaba elaborada previamente a la fecha de los alegatos. “Es un claro prejuzgamiento”, aseguró durante esa jornada, y amenazó con pedir la anulación del juicio. El letrado dijo que no dio a conocer antes la irregularidad para comprobar si la copia efectivamente correspondía al original de la sentencia.
Las acusaciones provocaron un sacudón institucional y la presentación de los jueces en la Fiscalía y la apertura de un sumario por parte del STJ. Además, poco después, a mediados de febrero, el Consejo Directivo del Colegio de Abogados decidió darle intervención al Tribunal de Disciplina y Ética, para analizar la presentación del abogado José Mario Aguerrido, que solicitó que se analice un reproche a la conducta ética de su colega. La institución, por otra parte, desechó presentarse como querellante en la causa penal abierta, como había pedido Aguerrido.
La sentencia fue corolario de un caso que conmocionó a la opinión pública provincial. Los docentes de 25 de Mayo fueron condenados por tres casos y absueltos en otros tres por el beneficio de la duda. El profesor Marcelo Tatavitto recibió 18 años de prisión por abusos sexuales gravemente ultrajantes de los tres niños. Oscar Aníbal López fue condenado a 7 años como autor del mismo delito, en un caso. Las maestras jardineras fueron condenadas, María Angélica Bastías a 7 años de prisión por su participación en el abuso de uno de los niños y María José Tello a 3 años y 6 meses de prisión y 7 de inhabilitación para ejercer, en su caso por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público por uno de los niños abusados. (El Diario de La Pampa)
