Se cayeron las ventas en un 50% y se prevén más despidos porque “es imposible mantenerse, no lo podemos soportar”. Pequeñas y medianas industrias padecen el aumento permanente de la harina, el tarifazo y la reducción del consumo como consecuencia de las políticas económicas.
La crisis socioeconómica que provocan las medidas políticas nacionales impacta de lleno sobre la industria panadera local: las ventas se vinieron a pique después de los últimos aumentos y ya hay despidos en algunos comercios, según admitió el presidente de la cámara que agrupa al sector, Eduardo Duscher.
El dirigente trazó tal panorama de la situación que atraviesan que consideró que en ese marco “el aumento ha pasado a un segundo plano”.
“La caída de ventas es del 50 por ciento, esta última semana mucho más, viene bastante complicado. En 25 de Mayo se han producido despidos, también se mira esa posibilidad en Santa Rosa, porque es imposible mantenerse. Se ha reducido la producción, ya no permite mantener empleados”, alertó Duscher en diálogo con periodistas de El Diario.
La harina, pum, para arriba
Duscher reveló la situación de constante inestabilidad que afrontan, a partir de la variación en los precios y de la imposición de condiciones por parte de los sectores más poderosos del mercado.
“Estamos tratando de llegar a un consenso para que productos como la harina y sus derivados puedan regularse. La harina se compraba en 630 pesos y en 72 horas estaba a 850. Es un desfasaje imposible para las empresas pequeñas, no lo podemos soportar, no podemos manejarnos con ese tipo de situaciones”, aseveró.
Ese precio es para la bolsa de harina 000, de 50 kilogramos. “Y en los próximos días estaría a 900 pesos la bolsa”, añadió en Radio Kermés al describir el contexto.
“Los molineros, algunos productores, no venden el producto, el trigo, y eso pone en jaque a la pequeña y mediana industria. Y además los derivados han aumentado un 45%”, advirtió.
Hizo notar, además, la especulación que hay en el sector, porque él mismo comprobó en las últimas horas que “el trigo se ha mantenido desde el viernes a hoy con el mismo precio, e incluso en baja, y los precios siguen aumentando”.
Duscher dijo que en promedio el precio del pan en la provincia está entre los 50 y los 60 pesos. “Hay más baratos, pero faltan controles, crece la clandestinidad”, advirtió.
También indicó que en Santa Rosa “hay lugares más caros, pero esas noticias (las que hablan de un kilo de pan en 70 u 80 pesos) surgen por parte de la prensa en Buenos Aires”.
Además, recordó en que “acá en Santa Rosa pagamos en octubre el tarifazo que se anunció. Eso suma y acumula, y no hay forma de poder mantener un negocio como corresponde. Te llevan a trabajar en la clandestinidad, así de simple”.
