Rubén Marín rescató el trabajo de la militancia peronista en Santa Rosa. Dejó una mirada sobre lo sucedido en General Pico y dijo no saber los motivos de la ausencia de Carlos Verna en la campaña. «No se puede hacer responsable de los hechos a la actitud de una sola persona», remarcó.
El exgobernador y expresidente del Partido Justicialista, Rubén Marín, salió a hablar este lunes después de la dura derrota electoral del Frente de Todos en La Pampa.
Si bien reconoció el triunfo de la oposición, Marín dijo: “también hubo demérito del peronismo”. En este sentido apuntó a la dirigencia justicialista de General Pico la cual -consideró- “no estuvo a la altura de las circunstancias”.
Marín asintió que “era difícil el planteo ya después de las PASO porque la diferencia de votos era mayúscula. Vi un trabajo eficiente en Santa Rosa con la militancia, que es lo que ha podido revertirla. Esta ciudad no es fácil, al contrario siempre fue difícil para el Justicialismo. Se trabajó bien, sin divergencias y disimulando las diferencias que podía tener cada sector y se ganó».
«No puedo hablar de otros lugares porque no he salido mucho como para fijarme esos detalles que supongo yo observarán quienes han tenido la responsabilidad conducir este proceso desde el justicialismo”, añadió en declaraciones al noticiero «Somos La Pampa».
“Corresponde felicitar a la oposición porque ha ganado bien la elección y tiene sus méritos, pero más allá de ello no se gana o pierde por un solo motivo», aseveró.
Y subrayó: «algunos tienen más peso que otros y quienes particularmente tienen la responsabilidad de conducir el justicialismo deberán hacer un análisis para saber qué hay que corregir. No hay que restarle méritos a la oposición, sin embargo hay que saber cuál fue el demérito nuestro”.
Sobre la ausencia de Carlos Verna en la campaña, deslizó: “Yo no sé… no he hablado con Verna, ni he estado en Pico. Yo creo que hacer responsable a la actitud de una sola persona, es a mi modesto entender desconocer el peronismo».
«Si vos perdés por una cifra de votos como se perdió en Pico, que es considerable, habrá una suma de causas, ¿Cuál fue más importante? No la conozco. La dirigencia de Pico no estuvo en mi concepto a la altura de las circunstancias. La licencia de la intendenta previa al proceso electoral, un intendente que asume y declara que no se va a meter en política… No sé. Sí un intendente no se mete en política… No se me pareciera a mí que fue inoportuno, son aspectos que se suman…”, analizó.
El expresidente del PJ también expresó: “no creo en el boicot de nadie, pero sí resulta raro que en Pico, donde siempre ha sido una ciudad que ha posibilitado el triunfo del peronismo en la Pampa, haya habido una disminución de votos en una cifra importante. Es real que han ingresado nuevas generaciones a votar y no sé en Pico cómo se ha trabajado. Lo que sí sé es que la derrota fue por una cifra como para tomar en cuenta, que esperemos poder revertirla”.
Por último destacó la buena gestión actual del gobernador Ziliotto y dejó una lectura sobre la gestión de Alberto Fernández: “no podemos desconocer el contexto nacional, sería torpe no verlo y que repercute en la provincia en donde los medios de comunicación llegan con una inmediatez de detalles que no han favorecido al peronismo”.
