Nacionales, Jueves 08 de Junio 2017
BUENOS AIRES.- El diputado Martín Doñate le solicitó a Jorge Lemus, ministro de Salud del Gobierno de Mauricio Macri, que reparta los 60.000 paquetes del plan Qunita que almacena hace más de un año por supuesta peligrosidad. En su momento, le había realizado un requerimiento similar al juez Claudio Bonadio, quien lleva la causa penal y determinó sean guardados. Ahora será el titular de la cartera de Salud el que deberá definir el destino de estos kits.
Mediante una carta, Martín Doñate, representante del Frente Para la Victoria por Río Negro, le requirió a Lemus que instrumente los mecanismos institucionales que correspondan para que las Qunitas sean entregadas a las familias de recién nacidos en su provincia.
Entre los fundamentos expresados por el edil explicó que Finlandia exporta a los Estados Unidos cunas de cartón, similares a las de madera inventadas y fabricadas en la Argentina y repartidas por el Estado hasta 2015. Las locales incluso contaban con sábanas, acolchado, toallón, mudas de ropa y juguetes. Según escribió el legislador nacional del FPV-PJ, «en Río Negro se entregaron varios kits en hospitales y jamás hubo una sola queja. Al contrario, fue reivindicado por todos los profesionales”.
Vale recordar que en abril del año pasado, Bonadio mandó almacenar todas las Qunitas adquiridas por el Estado y aún no repartidas. Doñate también requirió al juez el reparto de las cunas, pero le fue negado. Es por eso que el Gobierno gasta $ 770.000 mensuales para mantener las cunas. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, informó al Congreso que le pedirá a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) su custodia momentánea, para ahorrar el excesivo gasto.
En tanto, en agosto, Bonadio ordenó su incineración por «inseguras”, pero sólo un mes después cambió de opinión y decidió entregárselas al Ministerio de Salud para que decida su destino final. «No es necesario ser ingeniero para advertir los riesgos que conllevan para un bebé recién nacido los bordes filosos, las aristas vivas, o entre otras cosas, un componente de la cinta que puede ser desmontado, cuyo tamaño es peligroso al alcance del bebé», dijo el juez federal.