El sindicato argumenta, principalmente, tres razones para pedir la suspensión de la evaluación: Por una parte, refirió que se trata de «una evaluación que mide resultados y no procesos, borrando las diferentes trayectorias y contextos». En segundo lugar, agregó que «se constituye para los últimos años en una evaluación para los estudiantes, lo que significa su carácter censal, presuponiendo una selectividad, constituyéndose como limitante y restrictiva».
En tercer lugar, afirma el gremio en un comunicado de prensa, «es un evaluación externa y estandarizada en la que no se ha tenido en cuenta la participación de los trabajadores como meros ‘aplicadores'».
El gremio dijo que sostienen «la evaluación de aprendizajes desde la perspectiva y en el marco del Plan Nacional de Formación Permanente» y manifestó que «los resultados serán instrumento que estarán destinados a denostar y denigrar el trabajo diario» de los docentes y «estigmatiza» a los estudiantes.
«Repudiamos las declaraciones del Sr. Ministro de Educación (Esteban Bullrich) quien ha reivindicado la Conquista al Desierto, anticipando una segunda conquista, no con la espada sino con la Educación, asimilando de ese modo, desde una perspectiva «colonialista», el Estado de la Educación Pública al desierto y-o la barbarie del Siglo XIX», sostienen los secretarios generales del gremio.