Buenos Aires, 23 de Agosto de 2016
Productores frutihortícolas de Río Negro y Neuquén iniciaron este martes una protesta en Plaza de Mayo regalando manzanas y peras a los transeúntes, para concientizar a los consumidores y a las autoridades por la falta de rentabilidad del sector, que da trabajo a más de 60 mil personas en el sur del país.
Cerca de 70 productores atendieron este martes a la mañana a los periodistas de radio, televisión y agencias de noticias que cubrieron la protesta, explicando el reclamo y distribuyendo frutas a una extensa cola de consumidores que, con bolsas y e incluso carritos, esperaban recibir frutas de regalo.
En la intersección de avenida de Mayo y Bolívar, tras una montaña de cajones de manzana y entre los faroles de Plaza de Mayo, Jorge Figueroa, el presidente de la Federación de Productores de Frutas de Río Negro y Neuquén, explicó a Télam que con la protesta «ponemos en visibilidad la grave situación de quebranto del sector frutícola, que lleva a la desaparición de miles de puestos de trabajo y de sus unidades de producción», en alusión a los predios y chacras donde se produce la fruta.
«El problema es el precio. Al productor un kilo de pera o manzana le cuesta $4,50 y lo que percibe, en promedio, es de $2,80 por kilo en pera y $3 en manzana. Lo ideal sería que la renta fuera del 20%, entonces al costo de producción de $4,50 se le sumaría una renta de $1,50, lo que daría un precio de $6. Lo que nosotros queremos es por lo menos recuperar el costo.
Estamos perdiendo $1,50 por cada kilo producido», explicó sobre la situación del sector, en tanto los consumidores pagan entre $30 y $35 el kilo de manzana.
«Antes realizábamos cortes de ruta, que a veces lo único que generaban era apatía, pero ahora preferimos realizar esta protesta», menos agresiva y que despierta la solidaridad de la gente, según explicó.
«Queremos que el Gobierno se ponga a trabajar en políticas activas, regionales, de largo aliento, que den sustentabilidad y previsibilidad a la producción ya que somos grandes generadores de trabajo», detalló.
El sector frutihortícola de Río Negro y Neuquén da empleo a 60 mil personas y genera una producción de u$s1.200.000 anuales, y «de esa cantidad, el fisco se lleva en concepto de impuestos cerca de u$s 500 mil anuales», dijo Figueroa.
Señaló también que los sistemas de riego de la región del Valle de Río Negro, a través de canales que surgen de un dique de contención, son «centenarios» y «necesitan mantenimiento».
Dijo que la relación del sector con el Ministerio de Agroindustria «siempre fue buena, coincidimos en los diagnósticos para que se hagan aportes compensatorios que pongan en función a la producción. Nos dicen que no tienen respuesta. Es una decisión política».
«No cargamos contra la cadena de valor», dijo al aludir a la intermediación comercial, sino que abogó a que se «regule» ya que «el productor pierde y el consumidor paga mucho y en el medio está la voracidad fiscal», explicó.
A su turno, Raúl Robin, presidente del sector de las economías regionales de la CAME, dijo a Télam que «hace 15 días se sancionó una Ley Pymes que baja la presión fiscal. Esperemos que luego de la reglamentación tanto el Ministerio de Agroindustria como la Secretaría de Comercio pongan orden en el tema».
En diálogo con Télam Radio, el presidente de la Cámara de Productores de la localidad de Fernández Oro, Río Negro, indicó: “Nos hemos encontrado con grandes colas de gente, se han entregado más de 5 mil kilos”
«El artículo 11 de la Ley Pyme contempla a las economías regionales que recibirían beneficios compensatorios. Esperemos que cuando la reglamenten se conserve el espíritu legislativo de origen», señaló.
Un volante de la CAME indicaba que «mientras el Estado recauda en concepto de IVA por kilo de fruta en góndola $3, el productor tiene un quebranTo de $1,5 por kilo».
Entre cajones cubiertos por banderas argentinas y gente que protestaba porque algunos se adelantaban en la fila para recibir una manzana «red delicious», Pablo Castel, el presidente de la filial Villa Regina de Río Negro de la Federación Agraria Argentina dijo que «cobramos $3 por kilo de fruta y el costo de producción es $5. Hace siete años que venimos con esta situación de pérdida de rentabilidad».
«Proponemos que se cree un Instituto Nacional de Pera y Manzana para regularizar la producción, distribución y comercialización» de la fruta, y agregó que mientras tanto, en la coyuntura «proponemos que el Estado nos retribuya esa falta de rentabilidad con subsidios y con ayuda tecnológica».
«Pedimos un plan sanitario para el Valle de Río Negro, con entrega de remedios y dispenser de feromonas, que son elementos que nos permiten combatir la plaga de la mariposa, la carpocapsa (o polilla), en manzana y pera», indicó.
Respecto del gasoil, los productores piden un precio diferencial, sin impuestos.
En tanto, una señora identificada como Olga, trabajadora de maestranza y que desempeña sus tareas cerca de Plaza de Mayo, dijo a Télam que estaba presente en la cola no sólo para recibir la fruta «sino para apoyar y hacer fuerza entre todos. ¿Porqué tenemos que hacer esto en un país tan rico como el nuestro?», se preguntó la trabajadora originaria de Salta. (Télam)