(La Arena).- Una familia de Tucumán, que regresaba desde la Patagonia, sufrió un calvario por culpa de un error de la Justicia de su provincia. El año pasado le habían robado la camioneta y se la devolvieron, pero no levantaron el pedido de secuestro. Ayer llegó al Puente Dique y los encargados del puesto caminero se la retuvieron. El flamante responsable de la comisaría departamental, el subcomisario Samuel Zúñiga, logró destrabar la situación hablando telefónicamente con el fiscal del caso, y, tras más de diez horas de espera, continuaron viaje.
Zúñiga explicó a LA ARENA cómo fue la situación. «Esta familia llegó a nuestro puesto de control por la ruta 151 desde Río Negro, cuando el personal hizo el control y consultó al sistema nacional de datos judiciales, saltó que tenía un pedido de secuestro de la Justicia de Tucumán, de donde provenían», relató.
«Era una camioneta Ford Ranger -de color roja-. El conductor nos contó que en realidad a ellos se la habían robado el año anterior y que, tras recuperarla, se la habían devuelto hacía poco, y que volvían del sur adónde habían viajado por una cuestión familiar. Se enojaron un poco, pero entendieron que nosotros teníamos que cumplir con los requisitos legales porque había pendiente una orden de secuestro sobre el vehículo», agregó.
«Ante el problema decidí comunicarme con la Justicia de aquella provincia. Logré hablar personalmente con la Fiscalía que había intervenido y me corroboró lo que me decía este señor. No obstante le pedimos paciencia a esta gente hasta que nos llegara vía mail, un documento en PDF donde constaba la liberación de la orden de secuestro y entonces pudieron continuar con su viaje», concluyó Zúñiga.