Lunes 26 de Diciembre
La Oficina Nacional de Emergencia ordenó a la población abandonar por precaución la zona costera de la región de Los Lagos y las zonas de playa de otras cuatro áreas del sur del país. El sismo llegó a sentirse en varias ciudades del sur de la Argentina
Un sismo de magnitud 7,7 sacudió este domingo la localidad de Quellón, en el sur de Chile, según el servicio geológico estadounidense (USGS) por lo que se inició una evacuación en la zona por una alerta de tsunami, luego cancelada, y se registraron daños materiales, pero ninguna víctima mortal. El movimiento llegó a sentirse en varias ciudades del sur argentino.
Según el Centro Sismológico Nacional de la Universidad de Chile, el fenómeno telúrico se sintió a las 11.01 hora local (14.01 GMT) y su epicentro se localizó a 28 kilómetros al suroeste de Quellón y a 1.284 kilómetros de Santiago. Además, reportaron que la magnitud del sismo fue de 7,6 grados, a una profundidad de 20 kilómetros.
Tras el temblor, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) emitió una alerta de tsunami en la zona. Posteriormente, las autoridades redujeron su informe a estado de precaución.
En tanto, la Oficina Nacional de Emergencia informó las horas estimadas de arribo de las olas de alta intensidad. El primer impacto sería a las 12.21 (15.21 GMT) en la localidad de Melinka. Posteriormente, serían afectadas las playas de Bahia Mansa, Lebu, Ancud, entre otras, con horarios progresivos hasta las 16.17, (19.17 GMT), momento en el que el oleaje llegaría a Puerto Chacabuco. Por ello, los habitantes de dichas zonas ya iniciaron la evacuación hacia zonas más altas. Sin embargo, transcurridas las primeras horas estimadas para la llegada, no se registró oleaje anómalo.
«El terremoto nos agarró cuando estábamos tomando desayuno e inmediatamente salimos de la casa por el tsunami», relató a la televisión chilena un hombre cuando escapaba junto a su familia hacia los sectores más altos.
Los primeros informes indicaron que no se registraron víctimas fatales ni heridos a consecuencia del sismo, las comunicaciones telefónicas y de internet se mantuvieron, pero hubo daños en carreteras y cortes de energía eléctrica aislados en algunas localidades, según mostró la televisión local.
El sismo sorprendió a la población en Navidad, un día en que todo el comercio se encuentra cerrado.
Chile es uno de los países más sísmicos del mundo y ha puesto en marcha una estricta norma de construcción antisísmica, destinada a salvar vidas y evitar el colapso de los edificios.
En 2010, durante el primer mandato de Bachelet, otro terremoto, de magnitud 8,8, con epicentro en la región del Bío-Bío, fue seguido de un tsunami que mató a 156 personas, en lo que, según la Justicia, fue determinante la demora en activar la alarma de tsunami.
Además de realizar un llamamiento a la calma, las autoridades han pedido a la población que se mantengan informadas por los medios de comunicación y sigan en todo momento las instrucciones que se les impartan.