Buenos Aires, sábado 7 de enero de 2017
El titular de la CTA de los Trabajadores afirmó que con los datos oficiales que consignan que la mitad de los argentinos percibe ingresos inferiores a 8.000 pesos «queda demostrado que en la Argentina se puede trabajar y a la vez ser pobre».
Así respondió el dirigente gremial sobre la información sobre distribución del ingreso proporcionada por el Indec con respecto al tercer trimestre de 2016 que reflejó que alrededor de 8,2 millones de personas perciben salarios inferiores a 8.000 pesos.
«No me sorprende porque las políticas que se han ido generando durante décadas han propiciado una distribución desigual, salvo el período 2003-2013 donde hubo una recuperación lenta pero con muchos trabajadores en negro y mucho trabajo eventual», precisó Hugo Yasky en declaraciones a FM Delta.
En ese sentido, cuestionó a los «diarios que reflejan el pensamiento del Gobierno» y que «hablan de bajar el costo del trabajo diciendo que los salarios son altos y tenemos demasiado impuesto al trabajo».
«Es una trampa para vendernos otra vez las viejas políticas de flexibilización laboral que traerán más hambre y desocupación», señaló el dirigente de la CTA quien agregó que «lo que se recuperó con la reforma del impuesto a las ganancias» respecto del poder adquisitivo de los sectores con ingresos fijos «se perdió con los últimos aumentos» de precios y tarifas.