(Tiempo Argentino).- Fuentes ministeriales aseguraron a Tiempo que habrá un refuerzo en diciembre para el programa que permite la compra de alimentos. El objetivo de la cartera para 2021 es urbanizar 400 barrios populares y generar 300 mil puestos de trabajo a través del plan Potenciar-Trabajo
El Ministerio de Desarrollo Social anticipó que los beneficiarios de la tarjeta Alimentar recibirán un refuerzo durante el mes de diciembre que duplicará el cobro mensual. De esta manera antes de fin de año un millón y medio de familias percibirán entre 4 y 6 mil pesos adicionales (según la cantidad de integrantes) que podrán gastar exclusivamente en alimentos. La medida busca paliar la delicada situación de pobreza que según los datos del INDEC afecta al 56% de los menores de 14 años.
Cuatro de cada diez pesos del presupuesto 2020 de la cartera conducida por Daniel Arroyo fueron destinados a comprar alimentos y combatir la emergencia alimentaria que atraviesa el país. Según los datos que maneja el ministro, en lo que va del año se llevan invertidos 94 mil millones de pesos en asistencia alimentaria, un número que es 3,3 veces más alto que el gasto de todo 2019 en el área. El incremento en insumos está directamente vinculado a la mayor cantidad de personas que dependen del Estado para garantizarse su alimento. De acuerdo a cifras oficiales, hasta marzo eran 8 millones y hoy ya son 11 millones.
Según precisaron a Tiempo, el 78% de la inversión que hizo el ministerio para comprar comida se distribuyó a las personas a través de la tarjeta Alimentar. Este programa, lanzado por la gestión de Arroyo antes de la llegada del Coronavirus, permite a madres o padres con hijas e hijos de hasta 6 años que reciben la AUH contar con una tarjeta que solo puede ser usada para comprar alimentos. También reciben este beneficio personas con discapacidad que cobran la AUH y embarazadas a partir de los tres meses que cobran la asignación por embarazo.
El sistema también permite al Ministerio analizar los hábitos alimentarios de la población que recibe este programa. Y los datos también encienden las alarmas en términos nutritivos. En los últimos meses cayó la compra de carne, leche, frutas y verduras; mientras aumentó la adquisición de arroz, fideos y otros productos con harinas. Al principio del programa se registraba un promedio de dos compras grandes mensuales en supermercados. Y hoy se realizan hasta seis compras pequeñas en almacenes de cercanía, donde los precios suelen ser mayores.-